|| Eurosalud | Nutrición : : Habitos de alimentacion adquiridos en la infancia
La actitud frente a la comida y los hábitos de alimentación suelen adquirirse durante la infancia y de modo preferente en el medio familiar. La madre transmite al hijo el concepto de alimentos buenos y malos, de los gustosos y de los que saben mal, el momento en que se come y el que no se come, y las cantidades de alimento que se consideran razonables. En este proceso de aprendizaje influyen los factores genéticos y los factores ambientales, y el peso final del sujeto será el resultado de la interacción entre ambos factores. Al mismo tiempo que el niño aprende a comer, los alimentos y el hecho de comer adquieren un determinado significado. No es infrecuente que el comer se convierta en un modo de compensación de las frustraciones y adquiera un fuerte contenido emocional en la vida del sujeto. Comer deja de ser un placer social, un momento de intercambio y encuentro con los demás, y pasa a ser un placer esencialmente individual, en cuya realización el sujeto encuentra compensación a las contrariedades y frustraciones de la vida. Este significado emocional de la comida unido a la impulsividad como característica temperamental contribuye a los atracones incontrolados de alimentos de un importante número de personas obesas y de todas aquellas que sufren bulimia nerviosa. Otra característica de las personas obesas se refiere a la percepción de la cantidad de comida que está en muchos casos perturbada, de tal manera que comiendo más que los sujetos de peso normal consideran que su ingesta calórica es más bien reducida. Es decir, sufren un trastorno en la percepción de la cantidad que comen, similar, pero al revés, de lo que sucede a los pacientes con anorexia nerviosa, que ante platos de comida normales o pequeños los consideran desmesurados. El paciente obeso al plato desmesurado lo considera adecuado o insuficiente. ...
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