Laceración del tendón (corte del tendón)
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Descripción
El tendón de Aquiles se puede desgarrar parcial o completamente. Mientras que una rotura parcial puede ser totalmente asintomática o causar síntomas leves, una ruptura completa causa un dolor repentino e intenso y pérdida de fuerza en las piernas y la movilidad se ve afectada.
La ruptura puede causar síntomas como: dolor agudo tras un golpe directo en el tendón, se produce cuando se oye un ruido como un clic, hay hinchazón y hematomas (moretones), dolor en el talón (puede ser grave), no se puede poner un pie en el suelo, ni estar de pie o caminar cómodamente. En caso derotura parcial del tendón es probable que la movilidad de la extremidad sea normal, y el dolor menos intenso en comparación conla rotura total del tendón de Aquiles. Una fisura esta generalmente alrededor de 3. 8 cm a 6. 4 cm por encima de la inserción del talón. Algunos expertos creen que las grietas ocurren con predilección en esta área debido a un flujo limitado de sangre.
Causas y factores de riesgo
La ruptura del tendón de Aquiles se debe a: movimientos bruscos, pantorrillas fuertes, como ocurre durante las intensas actividades deportivas o al correr o saltar, sobre todo en hombres de mediana edad, estiramiento excesivo del tendón durante las actividades cuando ya está dañado por tendinitis u otras condiciones; tendinopatía, que pueden debilitar el tendón aumentando progresivamente el riesgo de ruptura, el tendón puede causar estrés por rupturas repetidas, inyecciones de corticosteroides (en el pasado por lo general se utilizaban como tratamiento para las lesiones del tendón): los corticosteroides pueden debilitar o romper el tejido del tendón de Aquiles.
Diagnóstico y tratamiento
La ruptura del tendón puede ser tratada por: Cirugía, seguida de un programa de rehabilitación para la recuperación total de la función del tendón; Uso de férulas, botas de yeso u otro dispositivo que mantenga la pierna inmovilizada, este método conduce a la curación del tendón, pero puede mantener una cierto fragilidad, de modo que una nueva ruptura puede ocurrir en cualquier momento. La fisioterapia u otro programa de rehabilitación restauran la flexibilidad y la fuerza de las piernas.
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